Extracto del medio de comunicación

[trx_title][/trx_title]

Javi Gómez: «Por no ver el futuro estamos enfermos de pasado»

El escritor y periodista presenta ‘La gran desilusión’, una recopilación de artículos que orbitan en torno a una sensasión inédita de frustración colectiva

En La gran desilusión (Círculo de tiza), el periodista Javier Gómez (Madrid, 1978) reúne varios de sus artículos de opinión publicados en prensa, a modo de reflexión sobre las grandes frustraciones de su generación. Hilados con un ensayo inédito y homónimo al libro, el que fuera director de Papel hace un ejercicio de crítica social en el que hay hueco para pasar la actualidad por su propio prisma y dividir esa angustia en otras siete, como la cultural, la política o incluso la periodística.

Empecemos por lo obvio. ¿Cuál es esa desilusión?
Somos la generación más preparada, pero la más inmadura de la historia. Somos los que peor manejamos la incertidumbre. Creo que el mundo está cambiando a una velocidad mayor de la que podemos cambiar los seres humanos. Todos esos cambios provocan que se nos atragante la rapidez de estos tiempos. Los referentes y los medios también cambian a pasos agigantados.

¿Qué resultados arrojaría una radiografía del periodismo español?
El periodismo está pagando haber mirado por encima del hombro a su público. Creo que estamos viviendo una gran crisis que no es tanto del periodismo como de su modelo de negocio.

¿Están los medios pagando sus propios platos rotos?
La gente nos está haciendo pagar nuestra ausencia como cuarto poder. Se ha perdido la fe en las instituciones periodísticas.

¿Es un problema derivado de la brecha generacional?
Mi generación tiene más desilusiones que la de mis padres. Y la siguiente, más que la mía. Al final es exactamente eso.

En el libro se pregunta si Star Wars será el Star Wars de nuestros nietos.
Se nos ha roto la máquina del futuro y la nostalgia es una tentación que corre el riesgo de paralizarnos. Al final, por no poder ver el futuro, estamos enfermos de pasado.

¿Cómo es posible que gente que no ha vivido los 80 pueda tener nostalgia de los 80?
No somos capaces de generar nuevos mundos y encontramos refugio en la cultura pasada, pero reformateada.

 Dice que «vivimos en la cosmética de la razón pura». ¿Dónde está el límite ente poscensura y lo políticamente correcto?
La corrección política es hacia los demás y la poscensura es hacia dentro. Cuando los sistemas se sientes débiles es cuando llega la censura. A nuestro sistema le pone muy nervioso que alguien cuelgue un cuadro o cante una canción porque se siente débil, porque nota los vientos de cambio en la nuca.