Extracto del medio de comunicación
Recomendaciones
Me gustaría recomendarles cuatro libros en este arranque de verano, pocos para quienes son lectores contumaces, pero ese es el límite que impone el espacio de esta columna; los dos primeros, Cuando el Vips era la mejor librería de la ciudad, de Alberto Olmos, y Galdós, de Yolanda Arencibia, ya vienen previamente recomendados por Rafael Reig, autor que incorporo a los recomendables para completar mi lote; el libro de Reig, Amor intempestivo, es un ajuste de cuentas contra sí mismo y su generación, esa generación que aún no ha entrado en las páginas amarillas de la literatura porque los padres, los Millás, Mendoza, Marías, Muñoz Molina, aún activos, se resisten a conceder la independencia a sus vástagos. Andrés Ibáñez, por edad, también debería inscribirse en esa generación, pero es un pájaro solitario, al que ateniéndose al título de su libro (Nunca preguntes su nombre a un pájaro) no hay que pedir filiación porque no la tiene y su sensibilidad, de un espiritualismo entre zen y franciscano, no casa con los tiempos que corren; Alberto Olmos es de una generación posterior, ya plenamente internáutica, y de hecho los artículos que componen su particular vips fueron publicados con anterioridad en un blog digital, oscilantes entre la crítica literaria y la cuestión social, con una fijación especial en el feminismo o el cambio climático que abren los ojos aún no adormilados por el pensamiento único. La biografía de Galdós aún no la he leído, pero me permito arriesgar una recomendación a ciegas, inspirándome en el método de Wilde, que no leía los libros que criticaba por miedo a que la lectura influyera en su opinión.