La Dominga

Mi abuela La Dominga le llevaba todos los días la comida a su hermano soltero. Desayuno, almuerzo y cena. Cogía la cesta, metía la olla y la tapaba con un paño de esos de cocina de toda la vida. De esa generosidad, de esa humildad, que viene de humus, de tener los pies bien anclados a la tierra,…