Un fondo de pereza
Me gusta, como Duchamp, respirar más que trabajar. «Me hubiera gustado trabajar pero había en mí un fondo de pereza tremendo. Nunca he trabajado para vivir. Trabajar para vivir es, en cierto modo, una estupidez desde el punto de vista económico», decía el francés. Me gustaría contar con toda esa energía que se necesita para…